Campo de aplicación:
- Limpiar piedra natural
- En fachadas, obras y sobretodo en restauraciones.
- Para la limpieza de superficies atacadas por sales, algas, musgos y manchas frecuentes en el cemento y en todo tipo de piedras, ya sean naturales o artificiales.
- Para la limpieza y eliminación de florecimientos salitrosos, frecuentes en gran parte de materiales de construcción, causantes en gran medida de su degradación.
- Sobre soportes tipo: piedra, mortero, cemento, ladrillo y madera.
Propiedades:
Gran poder de limpieza y desinfección, con un amplio espectro de aplicaciones tanto en interiores como exteriores.
Fuerte acción bactericida y alguicida.
Alta capacidad para destruir colonias habituales de microorganismos.
Libre de cloro y formaldehído. Al agua, sin disolvente. Ecológico y biodegradable.
Modo de empleo:
Se puede aplicar desde su estado puro hasta su disolución 1:10 en agua, según las necesidades de cada superficie.
El limpiador ADI-200 se aplica desde la zona superior con pulverizados o brocha, insistiendo en los lugares donde se observe reacción. Dejar actuar unos minutos y aclarar con agua abundantemente.
En la industria alimentaria y para la eliminación de mohos y microorganismos, el limpiador ADI-200 se puede aplicar en estado puro o diluido (disolución máxima de 1:4 en agua).
El rendimiento medio de 6-10 m2/l puro.
El rendimiento dependerá del estado del soporte y de la dilución escogida: 4-20 m2/l.
Precauciones:
Usar guantes y gafas de protección. Mantener alejado del alcance de los niños. En caso de entrar en contacto con los ojos, enjuagarlos abundantemente con agua y consultar a un médico.
Para más información consultar ficha de seguridad
Datos técnicos
- Rendimiento: Aprox. 6-10 m2/l puro
- Densidad: Aprox. 1,04 g/cm3
- Valor pH: Aprox. 1,5
- Envase: 10 litros.
- Almacenaje: 2 años en su envase original y cerrado. Mantener en lugar fresco pero libre del riesgo de heladas.